Esta reflexión – en plena efervescencia del mundo del smartphone por el MWC2011- viene a cuento por la iniciativa de Microsoft de promover sus soluciones Cloud a través de un sitio web en el que, entre otros muchos contenidos, incluyen vídeos con la opinión de expertos entre los que -todo un honor- salgo yo. Y salvando aspectos promocionales me creo los mensajes que vende Microsoft. La tecnología Cloud, a pesar de escepticismos varios, está madura, lista para que la implanten las empresas y empiecen a beneficiarse de ahorros, energía y filosofía de trabajo en grupo.
¿Es la nube fiable?
Hoy, en 2011, a pesar del ruido mediático sobre todo lo que rodea a esta tecnología, podemos confiar plenamente en las soluciones cloud, tanto desde el prisma de disponibilidad como de seguridad. Incluso de la la velocidad. Que los líderes de la industria, con Microsoft y Google a la cabeza, apuesten claramente por el Cloud debiera ser una garantía.
El reto de la industria es luchar contra el escepticismo de las empresas tradicionales ante el cloud. La crisis global es en este sentido una oportunidad por el ahorro claro que supone la adopción de última tecnología a coste fijo y económico.
Apostar por soluciones Cloud también nos aporta un plus de seguridad. Y es que la industria tiene claro que este punto es estratégico
Beneficios medioambientales de la nube
La nube es ecológica. Nos permite reducir drásticamente nuestras infraestructuras informáticas, consumir lo que necesitamos y escalar a medida que crecemos. Y esto si se estandariza supondrá un ahorro muy considerable en energía,, en costes de reciclaje de hardware obsoleto… Es llevar la filosofía de compartir recursos a su máxima expresión. Y esto lo debe agradecer el planeta.
Ventajas e inconvenientes del Cloud
Las ventajas son muy claras. Disponibilidad global de nuestros recursos y aplicaciones informáticas en cualquier punto del planeta, escalabilidad de costes en función de nuestras necesidades con la garantía de soportar un crecimiento casi ilimitado, oferta de soluciones en todos los ámbitos: hosting, proceso de datos, aplicaciones… ; facilidad de uso e implantación, Seguridad garantizada, disponer siempre de la última tecnología…
En el terreno de los inconvenientes, el depender virtualmente de proveedores externos es algo que no gusta en las organizaciones aunque es algo más psicológico que real pues la dependencia ya existía antes. Otro hándicap es la velocidad de acceso a la nube, algo que no depende sólo de la industria Cloud sino de los proveedores de acceso a Internet. No obstante, en este campo se ha avanzado muchísimo y hoy día se pueden disfrutar de aplicaciones cloud con uso intensivo de recursos en tiempo real.