Qué bien lo hizo Barcelona -a pesar de que ni mucho menos fue gratis- de garantizarse la celebración del Mobile World Congress hasta al menos 2012. Y es que la capital catalana se ha convertido en el foco mundial de la tecnología esta semana, abriendo telediarios aquí y en los USA, concentrando a más CEOS por metro cuadrado que ninguna otra convocatoria y llevando algo de alegría a la hostelería de la tierra, de capa caída con tanta crisis.
El Mobile World Congress es una feria que, al estilo del CES de Las Vegas o el CeBIT, consigue que en esta era mediática, las compañías se guarden presentaciones espectaculares para desvelarlas en medio del evento. Como antaño. Por el valor amplificador del evento y la qualificación de la audiencia.
Por eso no es de extrañar que el mismísimo presidente de Microsoft, Steve Ballmer, se haya plantado en Barcelona esta mañana para presentar su nuevo concepto, los Windows Phones, y de paso hacer relaciones institucionales con el presidente de la Generalitat, José Montilla.
Nosotros, desde MuyComputer, estamos cubriendo a fondo el evento conscientes de que en tres días estamos viendo más tecnología que en el mes y medio que llevamos de año. Y lo que nos queda.
Por ahora, en un balance de urgencia de lo visto, esta primera jornada está marcada por los Windows Phones que no son otra cosa que smartphones gobernados por el nuevo Windows Mobile. También me ha llamado la atención el acuerdo de Vodafone con Opera para dotar de Internet a los móviles de gama baja, los terminales de Nokia, los nuevos HTC.…En definitiva, terminales a tutiplen con un denominador común: la tendencia al smartphone, con 3G, GPS y Wifi como elementos obligados.
El que no ha movido ficha en Barcelonaa, ni falta que le hace por ahora, es Apple con su iPhone. Aún así, no ha perdido protagonismo en el Mobile World Congress gracias a los centenares de periféricos diseñados para el glamuroso terminal de la manzana.
Pues eso, que estos días, la tecnología móvil habla catalán.