El máximo dirigente de Microsoft, ahora que Bill Gates está en la sombra dedicado en cuerpo y alma a su fundación, visitó el pasado viernes Madrid con una agenda apretada siguiendo el modelo de estos ejecutivos top cuando hacen “bolos”. Desayuno con empresarios, charla-alegato a su staff local, reunión con periodistas, conferencia en el club Siglo XXI, comida con la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD).… Y esto es lo que nos enteramos, que de las citas secretas, rien de rien.
Indudablemente, el tema que más salió a la palestra en el encuentro con los medios fue la oferta de compra de Yahoo! de 31 dólares por acción hace dos meses y que la dirección de la compañía del portal más popular del mundo rechazó. Steve Ballmer, que está gastando toda su energía (que es mucha) en convencer a los accionistas de a pie que pagar 80 veces el beneficio es un chollo, amenazó entre líneas en bajar la oferta en los próximos meses. Incluso habló de hacer directamente una OPA. Menudo es él.
Ballmer está convencido que Yahoo! necesita la energía y el músculo financiero de Microsoft. mientras que la compañía de Seattle quiere volumen crítico en el terreno de la publicidad on-line para hacer frente a su enemigo de verdad, Google. Ya no se esconden ambas firmas, como hace un par de años. Eso sí, no sé si debido a la bravuconería de Ballmer, pero ayer las acciones de Microsoft cayeron un 6 %.
En el almuerzo con empresarios y periodistas Ballmer toreó bien. Se mostró optimista a pesar de la crisis galopante que se palpa en occidente. En tiempos duros es cuando más se necesita la tecnología como elemento innovador, vino a decir. Metió caña al software libre y dijo que el software es el motor de la industria tecnológica y por tanto larga vida al negocio de los aplicativos. Aún así, se apuntó el tanto personal de abrir el código en ciertos productos. “Windows es mejor que Linux” fue su reflexión final. Genio y figura para el segundo accionista de referencia de Microsoft.
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